La Copa Argentina entregó este miércoles una de sus definiciones más intensas de los últimos años.
En el Estadio Juan Domingo Perón, en Córdoba, Independiente Rivadavia se consagró por primera vez campeón del certamen tras vencer a Argentinos Juniors, en un partido en el que sobraron tensión, roces y controversias arbitrales. Además del título, el equipo mendocino consiguió el pasaje directo a la Copa Libertadores 2026, premio que le otorga aún más valor a la conquista.
Desde el inicio se notó que se trataba de una noche especial. Alex Arce abrió el marcador a los 8 minutos, desatando una fiesta en la tribuna leprosa. Sin embargo, lo que venía sería mucho más complejo de sostener. El árbitro Nicolás Ramírez, con apoyo de VAR (utilizado por primera vez en esta edición), comenzó a mostrar tarjetas y a frenar el juego con decisiones discutidas.
La situación se complicó para los mendocinos a los 40’, cuando Maximiliano Amarfil fue expulsado por doble amonestación. Con uno menos, Independiente Rivadavia se replegó, sabiendo que todavía quedaba un largo tramo por resistir.
Lejos de caerse, el equipo mendocino sorprendió en la segunda mitad: Matías Fernández marcó el 2-0 a los 16’, en un contraataque que parecía definir la historia. Pero Argentinos respondió rápido. A los 2 minutos, Alan Lescano descontó y el partido volvió a encenderse.
La tensión escaló: el DT Alfredo Berti fue expulsado por un cruce en una disputa de pelota, y poco después, Alejo Osella vio la segunda amarilla. Con 9 jugadores, el final fue una verdadera batalla. Argentinos, con superioridad numérica y empuje, llegó al 2-2 con un gol de Erik Godoy en los 14 minutos de adición, llevando la definición a los penales.
Desde los doce pasos, la historia cambió. Tomás Molina tuvo dos chances para Argentinos y falló ambas, mientras que la Lepra se mostró más firme. Esta vez, Sergio “Chiquito” Romero no pudo convertirse en héroe.
Independiente Rivadavia gritó campeón, haciendo historia y dando uno de los golpes más resonantes del fútbol argentino reciente.
El premio económico
Además de la clasificación a la Libertadores, el campeón acumuló 140.000 dólares en premios distribuidos por avanzar cada fase.
La final otorgó 58 mil dólares (aprox. $69.473.774) solo por el último partido.
