En un tono crudo, el presidente estadounidense describió a la Argentina como un país “que está muriendo” y anunció que analiza comprar carne nacional para contener la inflación en su país, tras reunirse con Javier Milei en la Casa Blanca.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a referirse a la crítica situación económica de la Argentina, al afirmar que el país “no tiene dinero, no tiene nada” y que “está luchando fuerte para sobrevivir”. En ese marco, aseguró que su Gobierno evalúa comprar carne argentina para bajar los precios en su propio país y, al mismo tiempo, “ayudar a un aliado que está muriendo”.
Durante declaraciones brindadas este domingo a bordo del Air Force One, Trump insistió en que importar carne desde Argentina podría “reducir la inflación interna” en Estados Unidos, donde los valores se dispararon por la sequía y la pérdida de rebaños.
Las palabras del mandatario norteamericano se conocieron tras su reunión con Javier Milei en la Casa Blanca, donde discutieron el auxilio financiero de 40 mil millones de dólares otorgado a la Argentina. Trump reiteró su respaldo al libertario, aunque condicionó la continuidad del apoyo a un triunfo electoral de La Libertad Avanza.
El mensaje dejó preocupación: mientras promete ayuda, Trump dibuja una imagen de una Argentina en caída libre.