Mientras la oposición avanza en el Congreso, Milei busca blindar su veto con acuerdos políticos y estrategias de presión territorial.
El Senado debatirá el aumento de las jubilaciones y la moratoria previsional tras la media sanción en Diputados. Aunque la oposición confía en aprobar la ley, el Gobierno ya anticipó que la vetará.
Desde Casa Rosada aseguran tener 87 votos para sostener el veto presidencial. Son los mismos legisladores que en 2023 frenaron el aumento jubilatorio y el financiamiento universitario.
Veto y presión territorial
La estrategia oficialista incluye negociaciones con gobernadores, que reciben apoyo nacional a cambio de lealtades políticas. Esos acuerdos podrían traducirse en ausencias o abstenciones en el Congreso.
En paralelo, el oficialismo presiona desde las comisiones. La Comisión de Trabajo, que encabeza el PRO, ya frenó debates claves.
Escenarios en el Senado
La oposición tiene los votos para aprobar el aumento del 7,2% y el bono de $110.000. Pero si las comisiones no se abren, impulsarán una sesión especial para forzar el tratamiento.
El futuro del aumento a jubilados se define en una pulseada política donde el veto es la última carta del Gobierno.
