La Residencia Interdisciplinaria en Salud Mental (RISaM) denuncia falta de cupos, nuevos ataques a políticas de salud mental y vaciamiento de establecimientos clave.

“Exigimos la restitución inmediata de cupos y el cese de las políticas de ajuste sobre el sistema de salud“, señalaron a través de un comunicado profesionales y residentes de diversas disciplinas que conforman el Hospital Nacional en Red Lic. Laura Bonaparte, luego que se confirme la falta de cupos destinados a la Residencia Interdisciplinaria en Salud Mental (RISaM) en el marco de un nuevo ataque y desguace del gobierno de Javier Milei. Según informaron fuentes informadas a El Destape, el vaciamiento se sostiene y extiende a todas las RISaM del territorio nacional. “¡Al manicomio nunca más!”, remarcaron.
La RISaM, un programa de formación de residentes en salud mental comunitaria, que funciona a nivel nacional en todo el país, sufre -hace varias semanas- importantes ataques y desguaces por parte del gobierno libertario. “Las disciplinas que dieron de baja son fundamentales para poder tener una atención integral a las 400 personas internadas en el hospital, que hoy es referencia nacional en salud mental y discapacidad intelectual”, explicaron desde el Hospital Nacional y Comunidad Ramón Carrillo (ex Colonia Montes de Oca), a este portal. En total, son cerca de 40 residentes en el Ramón Carrillo que integran las disciplinas de Terapia Ocupacional, Musicoterapia, Trabajo Social, Enfermería, Psicología y Psiquiatría; estas tres últimas no tendrán ningún cupo disponible para sus residentes a lo largo de este 2025.
Actualmente existen más de 30 RISaM en Argentina pero en este contexto de ajuste y desfinanciamiento, las consecuencias por la ausencia de inversión quedarán pronto a la vista: muchas de ellas dejarán de existir y otras carecerán de personal para la atención comunitaria para la población más vulnerable. “Este vaciamiento de cupos sucede a lo largo y ancho del país e implica el cierre de las residencias, ya que sin nuevos ingresos no se puede garantizar la continuidad de los dispositivos de formación profesional en trabajo interdisciplinario en Salud Mental”, indicaron desde el Bonaparte. En esa misma línea, sostuvieron que se trata de una “medida arbitraria, sin fundamentos técnicos ni justificación”.
Desde el Ministerio de Salud de Nación, según pudo confirmar El Destape, explicaron que decidieron reemplazar los cupos de residencia de la RISaM por “cupos para los profesionales que forman parte de dicha residencia interdisciplinaria” (es decir, las especialidades de psiquiatría, psicología, enfermería, trabajo social) ya que, argumentaron, “la RISaM no cumplió con los objetivos para los cuales teóricamente fue creada“, a pesar de que el mismo gobierno brindó nuevos cupos en agosto pasado. “Igualmente, si así lo consideran, las jurisdicciones podrían continuar con estas residencias haciéndose cargo. En cada caso, deberán ser cubiertos por cada jurisdicción en particular”, advirtieron.
“Con el programa de la RISaM no se llega a cumplir con una formación completa y suficiente para cada una de las disciplinas que la integran, ya que alcanza sólo un 20% de la formación disciplinaria específica. El otro 80% del tiempo se dedica a la formación del Residente en el equipo interdisciplinario de salud”, justificaron desde la cartera sanitaria. “Es un número inventado lo del 20%, no está en ningún lado. Están diciendo: ‘Vos hiciste una residencia y del total de horas que trabajaste, sólo te cuento un 20%’. Eso no está en ninguna reglamentación o normativa”, se quejó Macarena García, jefa de Residentes en el Bonaparte.
También se suman los casos del Hospital de Alta Complejidad del Bicentenario de Esteban Echeverría, ubicado en el partido bonaerense con su mismo nombre y el Hospital El Calafate, en la provincia de Santa Cruz (ambos no recibieron cupo para ninguna de las disciplinas, tal como ocurrió con el Bonaparte días atrás).
Brutal accionar del Gobierno: la Salud Mental, en jaque
El presidente Milei -a través del proyecto denominado Ley Ómnibus– ya había intentado eliminar diversas normativas relacionadas a la salud mental. Entre otros cambios, el mileismo buscaba facilitar las internaciones involuntarias y habilitar el regreso de los “manicomios”, dando luz verde a negocios en torno a las intervenciones y a las clínicas privadas. Es decir, eliminar los dispositivos comunitarios. Si bien el capítulo de Salud Mental fue eliminado de la Ley Bases, que terminó siendo aprobada por ambas cámaras en el Congreso de la Nación, el ataque a establecimientos de atención comunitaria es una constante desde inicios de este año.
“Sólo nos enviaron un mail con un link a un Excel donde se enlista las disciplinas y todas las columnas al lado dicen ‘cero cupos’. Lo que dicen del Ministerio de Salud es falso, este mismo año sacaron los criterios para el Financiamiento Nacional de Residencias 2025 donde se especifican los objetivos que tienen que cumplir las residencias para estar financiadas por Nación. Lo cumplimos al 100%, por eso enviamos una carta donde justificamos -punto por punto- por qué cumplimos todas”, manifestó García a este medio desde el Bonaparte.
Entre los criterios señalados en el Sistema Integral de Evaluación de las Residencias del Equipo de Salud (SIER), se destacan tres dimensiones: condiciones institucionales, condiciones de formación y condiciones laborales. El SIER tiene el objetivo de otorgar, dependiendo del análisis de estos tres puntos mencionados, un determinado nivel a cada institución: Nivel A (plazo de cinco años de financiamiento), Nivel B (tres años, incluyéndolas en el Sistema Nacional de Residencias) y Nivel C (no obtienen reconocimiento, aunque podrán volver a solicitarlo luego de seis meses en una próxima convocatoria). En la disposición 12/2024, el Gobierno de Milei le otorga al Bonaparte el “Nivel B”, por lo que se le reconoce la Residencia Interdisciplinaria (RISaM) durante un período de tres años. Dicho período, ahora, está siendo incumplido por Nación.
“Desatiende la Ley Nacional de Salud Mental N° 26.657 en su Art. 8, donde se especifica que las personas con padecimiento de salud mental tienen derecho a ser asistidas por un equipo de salud interdisciplinario en salud mental. Y en segundo lugar, el mismo Ministerio está incumpliendo con su propia reglamentación -presentada por la gestión actual- de ‘Criterios para el financiamiento nacional de Residencias 2025’, en la que la RISaM del Bonaparte cumple con todos los requisitos. Esto último fue evaluado y aprobado por Salud, que certificó el control de calidad de las residencias interdisciplinarias en salud mental por la Dirección Nacional de Talento Humano y Conocimiento, aprobándolas por disposición en Boletín Oficial”, remarcaron.
Ante la consulta, Johanna Ceballos -residente de psicología en el Ramón Carrillo- dijo desconocer si los cupos que fueron eliminados son direccionados a otras disciplinas o directamente, desaparecen. “Para nosotros, esto es volver a un paradigma anterior. Sabemos que nuestro lugar en el hospital es tensionar con la visión manicomial sobre la salud mental“, indicó. Y opinó: “Tampoco nos parece azaroso que los hospitales donde se cerraron directamente los cupos sean el Bonaparte, el Bicentenario y el Calafate… Tienen una impronta, por su nombre o su historia, cargan con un peso más vinculado a una gestión en salud muy distinta”.
Durante la jornada del viernes pasado, todas las RISaM del país formaron parte de una reunión con el Consejo Honorario Consultivo de la Ley de Salud Mental -órgano creado para que se cumpla con la normativa, compuesto por diferentes actores del campo- para definir los pasos a seguir. “Todas coinciden en que no hay diálogo con el Ministerio”, sostuvieron.
“El cierre de las RISaM tiene un peso simbólico enorme, nacen con la vuelta a la democracia justamente como un intento de hacerse cargo de los efectos sobre la salud mental de esa época trágica en nuestra historia y con una fuerte militancia de los organismos de derechos humanos. Esa es la impronta y el espíritu de las RISaM que hoy están atacando e intentando desmantelar”, sostuvo Ceballos.
Como líneas de acción, este portal pudo averiguar que trazaron una agenda repleta de medidas en los diferentes establecimientos de salud mental. En primer lugar, el pasado lunes, llevaron a cabo una jornada de “sensibilización y difusión en los servicios” junto al lógico cese de actividades mientras que este martes 15 de abril, profesionales y residentes dispusieron un paro total. Además, se elevó un pedido de informe al Ministerio de Salud de la Nación para dar cuenta de todas las medidas tomadas hasta el momento y se mantendrán, hasta tener respuesta alguna, en “estado de asamblea permanente” en todas las residencias del país.
Por su parte, según indicaron a El Destape, profesionales del Hospital Bonaparte se mantendrán de paro. Este mismo martes, entre las 14 y las 18 hs, llevan adelante una convocatoria al “Festival ResiFest” para apoyar a las RISaM y luchar contra un nuevo ataque de Milei a las políticas de salud. “Las residencias no son sólo un espacio de formación profesional de excelencia, sino también un dispositivo de atención directa a personas en situación de vulnerabilidad. El cierre no solo afecta a residentes y trabajadores, sino también a la población que acompañamos”, sentenciaron.